Hoy toca hablar sobre el estado de la participación escolar, y también exponer algunas medidas para que se pueda seguir desarrollando en los próximos años de forma correcta.
Pero antes de todo, ¿qué es la participación escolar? Se trata de un proceso, en el que participan varias partes, incluidos los padres, en el proceso de aprendizaje de los estudiantes, gracias al cual podrán informarse, situarse, posicionarse, movilizarse, crear y transformar mientras sus respectivos hijos se encuentran en el periodo de escolarización. Todo esto se puede logar de diferentes y variadas maneras, como puede ser durante el horario escolar, pero también en horario extraescolar.
Como se ha comentado en el párrafo anterior, en la participación escolar juegan un papel importante varias partes, pero la que más destaca, por encima del resto, son los padres, una figura que con el paso de los años ha ido perdiendo mucha importancia en cuanto a la participación escolar se refiere; un ejemplo es la reducción de las horas de tutoría entre padres y profesores, pues hay muchos casos en los que solamente se limitan a una reunión durante todo el curso.
Para solucionar este problema, desde hace algunos años, en varios centros educativos, se están desarrollando diversas propuestas para que los padres tengan una presencia más activa en la participación escolar. En este sentido, me gustaría resaltar los "Siete consejos para fomentar la participación de las familias en la escuela" de Diana Cepeda, son los siguientes:
- Charlas de integración familiar: la primera reunión del curso se puede utilizar para concebir la idea de que los profesores, los padres y los niños formarán una gran familia mientras dure el año escolar, para buscar un bienestar común entre todos.
- Actividades de aula: puede ser una manera muy buena para empezar a conocer el entorno de cada estudiante en varios aspectos, como pueden ser los integrantes de su familia, su situación familiar, el trabajo de los padres... Más tarde, cada alumno puede presentarlo en clase con sus compañeros.
- Gymkanas u olimpiadas: organizar actos deportivos y culturales en los que no solo participen los niños, también los padres y así promover la unión y el trabajo en equipo.
- Día de la familia: un día estará planificado ara dedicarlo a compartir con las familias de los estudiantes. Es una ocasión en la que se podrá charlar en un ambiente más informal y también estrechar lazos de compañerismo entre los diferentes padres.
- Grupos interactivos de padres: en estos grupos se fomentaría el diálogo, se intercambiaría información, se plantearían dudas, se trabajaría la consulta de tareas... Para facilitar su buen desarrollo también se pueden hacer de forma telemática.
- Promover el contacto diario: cuando varios padres se juntan en la entrada o en la salida de los alumnos del centro, ese tiempo se puede aprovechar para intercambiar información con los profesores sobre hechos concretos de los estudiantes que pueden estar afectando a su aprendizaje.
- Más entrevistas y reuniones entre padres y tutores: más presencia de estas reuniones personalizadas a lo largo del curso; también pueden servir como una puesta en común de diferentes ideas.
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